martes, 8 de mayo de 2007

Momentos prohibidos

Cual será el destino de las almas insensatas, que por querer, no quieren mas que unirse en silencio, que por sentir no sienten mas que le uno al otro y por ser no son mas que sensaciones de anhelo y tristeza. Fusión perfecta de cuerpo y mente, tímidos roces que evolucionaron en caricias sentidas, miradas intensas que fraguaban desenlaces prohibidos. Sorprendidos por la noche, sus tímidas sombras se vieron separadas por promesas de obligado cumplimiento, que aunque no deseadas, pretendían marcar un antes y un después en el tiempo. Nunca nadie sabrá que fue lo que ocurrió aquel día, quizás fuera el preludio de todo o de nada, pues lo que empezó meses antes como un inocente intercambio de palabras, se había convertido en algo incontrolable. Frenados por la razón intentan no reproducir actos que les lleven a lo mismo, pues una y otra vez, y tras vanos intentos de autocontrol, sus vidas trazan siempre el mismo camino, un camino por el momento prohibido, un camino del cual desconocen su fin.

3 comentarios:

Niña dijo...

Que bonito.
A los que no somos tan racionales, nos gusta vivir de vez en cuando esos momentos prohibidos. Un gran abanico de posibilidades. Un gran muestrario de anhelos e ilusiones.

Que sería la vida sin ellos?.

Supongo que de lo más anodina.

Besos

Anónimo dijo...

Segundos,minutos,horas...y un reloj marcando el tiempo.
Tiempo q no quisieran q avanzase, tiempo q no desean q se acabe, pues este, pondra fin a su momento prohibido.
Pero el reloj sigue marcando y el tiempo,llega a su fin;mas siempre les quedara el recuerdo de sus miradas, de decirlo todo en silencio, de sentirlo todo en una sola caricia y esa sensacion de q lo ocurrido fue verdadero.

Anónimo dijo...

Demasiado bonito para ser duradero,
Intenso pero breve,
Dulce a la entrada, amargo a la salida.

Quien puede pararlo? Sólo ellos lo saben.

Nada termina hasta que tú sientes que termina.

Saludos,

Kuqueta.